Si tienes un auto, prepárate para leer las cosas más desesperantes que alguien más puede hacer en él y que simplemente te hacen enloquecer. Sólo de leerlas, sentirás ese ardor en el estómago, que no es gastritis, pero ¡ah, cómo enferma!
Y si a eso le sumas que el “chistecito” te cuesta dinero para remediarlo… ¡perderás el control!
10 averíos que los demás pueden ocasionar a tu auto y te cuestan caro a ti
- Que la persona con quien viajas, salga de la reunión con “itacate”. Y porqué no… ¡mole! Algo que manche bien. Y claro como los contenedores no son los mejores, se riega en la alfombra de tu carro.
- Que tus acompañantes decidan comer abordo y dejar además de la basura de sus envolturas, un festín de migajas en los asientos y la alfombra.
- Y si en el punto anterior viajan niños, prepárate para quedarte pegado a cualquier parte de tu coche, gracias a que pasaron su paleta chupada por todos lados. Eso sin mencionar, el jugo derramado en las vestiduras.
Sin comer pero con niños abordo:
4. Qué tal cuando deciden brincar en tus asientos con los zapatos puestos, dejando sus adorables huellas marcadas por todos lados.
5. Y si el viaje es largo, podrían divertirse con la manija de la puerta (con seguro de niños, obvio) abriendo y cerrando, abriendo y cerrando…o utilizándola como catapulta para lanzar algunas alimento en forma de municiones.
La limpieza no se hará sola
Hasta este punto, no tendrás más remedio que llevar tu auto con especialistas para que le laven las vestiduras, asientos, alfombra, techo, cinturones, puertas; en fin, todo el espacio trágicamente comprometido.
Si tu coche es chico tendrías que desembolsar 1,240 pesos, si es una camioneta chica 1,640 pesos, pero si tiene más de tres filas 1,940 pesotes.
Y si quisieras estar preparado para una siguiente catástrofe, podrías sumar al servicio de limpieza profunda, la aplicación de un repelente para telas, el cual obviamente tiene un precio extra: 500 pesos para auto chico y 1,000 pesos para camioneta de más de dos filas.
Además de dinero, temo decirte que perderás tiempo –sin tu medio de transporte-, ya que estos servicios suelen demorar de 7 a 14 horas.
Siguen las catástrofes
6. ¡El horror! Llevas a tu mejor amigo a su casa porque se le pasaron las copas en la posada y vomita adentro de tu carro. La lavada es lo de menos, el olor te acompaña por siempre y para siempre.
Para eso, además de la súper lavada, agrégale un tratamiento especial para combatir el terrible aroma, el cual te costará si es un carrito 600 pesos y si es una camioneta de más de dos filas 1,000 pesos.
Mientras tanto en el exterior del vehículo…
7. Vas saliendo del lavado y en el siguiente semáforo no falta el limpiaparabrisas que jura que no quedó muy limpio. Hace lo suyo y tu coche queda todo escurrido.
8. Avanzas unos metros y en el alto, otra persona comienza a frotarle una mopa súper mugrosa –según él limpiándolo-, lo cual causa algunos rayones a la pintura.
9. Vas a un evento en esta temporada navideña, te estacionas en el mejor lugar y luego descubres que justo ahí, los niños deciden lanzar fuegos artificiales.
10. Y cuando terminan, ¿una partidita de fut? Claro, usando tu auto como uno de los extremos de la portería.
Prepárate para llevar tu vehículo al taller para arreglarle unos detallitos de pintura que podrían salirte en unos 500 ó 700 pesos; o para comprar una calavera nueva porque le tocó la mala de un balonazo (alrededor de 1,500 ó 2,000 pesos).
Ahórrate más corajes, porque ¿ya cuentas con seguro de auto, cierto?
Gracias a Comparaguru.com por el artículo. Puedes leer el original aquí.